*"No se olviden de este obispo que está lejos y los quiere mucho", dijo el pontífice a los cientos de fieles que se reunieron en una vigilia en la Catedral de Buenos Aires.
Efe
"No se olviden de este obispo que está lejos y los quiere mucho", con estas palabras el Papa Francisco saludó a los cientos de fieles que se reunieron durante la noche en una vigilia en las afueras de la Catedral de Buenos Aires, donde el nuevo pontífice era arzobispo hasta antes del cónclave.
La llamada de Jorge Bergoglio desde el Vaticano fue difundida por altavoces en la Plaza de Mayo y sus palabras desataron un cerrada ovación. En la oportunidad, el pontífice pidió rezar y que las personas se cuiden "los unos a los otros".
"Gracias por haberse reunido a rezar y por las oraciones (...) cuidémonos los unos a los otros, cuídense entre ustedes, no se hagan daño. Cuiden la vida, la familia, la naturaleza, a los niños y a los viejos", dijo el pontífice.
El Papa también llamó a evitar "odios, peleas y envidias" y recurrió a un término muy argentino para hacerlo: "No le saquen el cuero a nadie", por el contrario, "dialoguen, que este deseo de cuidarse crezca en el corazón. Y acérquense a Dios".
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