*Presentamos a continuación el comunicado enviado por la organización "Democracia para Chile" por la toma del Ex Congreso Nacional en Santiago.
EXIGIMOS DEVUELVAN LA SOBERANIA SECUESTRADA: PLEBISCITO AHORA !!!
Chile cumplió más de dos décadas desde el término de la dictadura, en que su soberanía fue secuestrada por la clase política, la que optó por vivir de espaldas a los ciudadanos, en impúdico maridaje con los grandes señores del dinero. Un sistema electoral que deformó la voluntad ciudadana y cerrojos constitucionales que petrificaron las normas impuestas por el dictador, terminaron por desesperanzar a millones, que percibieron que su participación no podía cambiar nada. Para mayor seguridad, desde el poder se preocuparon de asfixiar a los medios de comunicación que pudiesen dar una voz alternativa y de financiar generosamente con los dineros de todos los chilenos a los monopolios de la prensa. Cuando todo ello fallaba, la represión aparecía como en otras épocas e imponía el silencio de la muerte de tanto en tanto.
Y así vivimos muchas “elecciones”, donde en verdad se convocaba a la gente a presenciar un brutal derroche publicitario que sólo permitía participar con posibilidades a los de riqueza propia o a los que por adelantado vendían sus servicios políticos. En definitiva, sólo se podía optar por dos versiones de lo mismo. Y después de la elección, en agradecida retribución, se entregaban cargos claves del Gobierno a los representantes de los mismos intereses que supuestamente había que regular y fiscalizar. En el Parlamento, también esos intereses quedaban con mayordomos instalados. Ha sido una época en que de acuerdo al refrán popular, los gatos se hicieron cargo de la carnicería.
Esta falta de soberanía ciudadana, esta mascarada de democracia, hizo posible que campeara el abuso de los poderosos, la depredación de nuestra naturaleza, el avasallamiento de las comunidades locales y regionales, el atropello de nuestros pueblos originarios, la falta de igualdades civiles y niveles de inequidad social difíciles de encontrar en otras partes del mundo. Mientras, los que ejercían el poder político profitaban cómodamente de los recursos públicos, acumulando, hasta hoy, irritantes privilegios.
Pero la ciudadanía se cansó del abuso. Hoy ha despertado y ha salido a las calles a exigir respeto. Ha entendido que en Chile deben haber cambios profundos y que ello ocurrirá sólo cuando las cosas comiencen a ser como deben ser: Que los ciudadanos manden y los Gobiernos y Parlamentos obedezcan.
La clase política, no obstante, se resiste a aceptar que la Democracia deje de ser una cáscara vacía que sólo sirva para hacer eco de su propia voz. Desde el Gobierno se escatiman los cambios y se reprime. Desde el Congreso, vemos intentos de cooptar la energía social y administrarla para que nuevamente, cambien algunas cosas para que nada realmente importante sea cambiado.
Sin embargo, la tensión se acumula y la crisis se agrava ante la incapacidad del sistema político de responder a las exigencias sociales. Chile exige soluciones y estas no pueden venir de una clase política de tan precaria representatividad y cada día más desprestigiada. El único que puede y debe decidir los grandes conflictos de Chile es el mismo pueblo chileno, recuperando para si el ejercicio directo de la soberanía secuestrada.
Es por todo lo anterior que hoy exigimos al Congreso Nacional que le restituya de inmediato la soberanía a los ciudadanos, instituyendo el plebiscito vinculante como la herramienta con la que los chilenos y las chilenas podremos resolver directa y legítimamente los grandes conflictos del país y comenzar a construir en paz una Nueva y Real Democracia.
Santiago, 20 de octubre de 2011.
Democracia para Chile
Que la Mayoría Decida
¡Plebiscito Ahora!
No hay comentarios:
Publicar un comentario